En Brasil deben estar felices, la próxima década estará llamada como una gran oportunidad para este país sudamericano que desde hoy, entrará en una inercia que si saben aprovechar los catapultará a los ojos del mundo. Hoy, todos hablamos de Rio, de Brasil, de que organizarán un Mundial de Fútbol en el 2014, y que luego en 2016 volverán a recibir al mundo con unos Juegos Olímpicos.
Las razones por optar or Brasil pueden ser muchas, no podemos descartar que un voto de confianza muy fuerte es tener la carta de organizador de un Mundial de Fútbol y la infraestructura que este necesita, lo cual se conjugaría perfectamente para lo que ocurriría en Rio, dos años después. La inversión en cuanto a este rubro, tiene más certeza y un poco de menor riesgo en la ciudad carioca.
Brasil tendrá un impulso en materia de infraestructura, inversión, vialidad, comunicaciones con estos dos eventos, y aunque las inversiones van a ser millonarias y estratosféricas, la llegada de capital extranjero por los inversionistas, patrocinadores, contratistas van a producir un efecto que si lo aprovechan puede mover a toda su economía.
La generación de empleos, la conformación de empresas de servicios, industrias relacionadas a la construcción, el deporte y las comunicaciones van a tener un auge importante, por lo que quizás estemos viendo el empujón definitivo para que este país alcance otro nivel más allá de ser una economía emergente.
¿Les gustaría ir a Rio 2016? ¡A quién no! Después de este video, hay mucho para ilusionarse: