Había un comercial de jugos Jumex que “atacaba” al segmento de los aficionados al fútbol que decía: “También hay aficionados profesionales” y cuando hablamos de profesionalización en el fútbol, hablamos en todos los aspectos.
Hoy en día, el aficionado tiene infinitas opciones de información que lo convierten en un “aficionado profesional” porque invierte mucho tiempo en seguir y permanecer informado de su equipo. Esa inversión y ese conocimiento lo convierten en un profesional de la información, al grado de manejarla mejor que muchos medios tradicionales.
A la vez, todos los integrantes de una organización deportiva deben sumarse a esta tendencia de profesionalización, conocer el deporte, las nuevas tendencias de la industria, acercarse al concepto mundial del juego, de la operación de estadios, metodologías, entrenamientos, técnica, servicios, y demás para convertir al club en modelo empresarial que pueda costear las evidentes cargas financieras operativas que supone tener un club profesional de cualquier deporte.
Es importante que los directivos de los clubes se preocupen por avanzar en sus áreas, por conocer más, capacitarse, entrenarse para la gerencia del deporte, y así todas las áreas en consecuencia. Esa capacitación, ese conocimiento, esa experiencia, ayudará a tener un nuevo panorama del producto deporte y una mejor gestión a nivel deportivo y a nivel empresarial, permitiendo mejores experiencias a los fanáticos por medio de vínculos fuertes y creativos, y redituando nuevas formas de ingresos para llevar al club a reinventarse constantemente.
La tarea puede llegar a ser monumental, pero capacitar a los colaboradores, instruírlos, compartir experiencias, suscribirlos a medios especializados, asistir a cursos, talleres, diplomados, maestrías, visitas, conferencias y más, ayudan a lograr un personal de mayor capacidad, siempre en beneficio del club, y el club también son los aficionados.