Nuevamente Carlos Vela confirmó su negativa de ser parte de la Selección Mexicana, al rechazar la oferta del nuevo técnico, Miguel Herrera de unirse al tricolor en su camino rumbo a Brasil.
Esta noticia no sorprende a nadie, pues muchos ya imaginábamos que lo único que el estratega mexicano recibiría del quintanarroense sería un “No”.
No pienso hablar mal de nadie, porque sinceramente no veo el caso a hacerlo, pero me parece que en este momento deberíamos ver, como me han dicho en varias ocasiones, la perspectiva completa.
Es cierto que Carlos Vela es uno de los jugadores mexicanos que más está destacando en estos momentos en Europa, pues ‘Chicharito’, Herrera y Reyes ven poca actividad; tan sólo en Diciembre se llevó el premio al Mejor Jugador de la LFP, y cómo olvidar los 4 goles que anotó contra el Celta de Vigo.
Claro, sabemos que su participación no fue muy destacada en la Champions League, pero repito, si lo comparamos con los otros mexicanos que hay en Europa, Vela se ha destacado.
El ser parte de una Selección Nacional, sea del país que sea, debe ser un orgullo para los futbolistas, pues están representando a toda una nación en competencias tan importantes como lo es la Copa del Mundo.
Entonces, ¿Por qué Vela no quiere ser parte de eso?
De acuerdo con el comunicado de prensa que Carlos Vela publicó luego de su reunión con Miguel Herrera, las razones por las que decide rechazar la invitación, es porque no se siente mentalmente preparado para volver a la Selección, sumado además, a que le parece injusto, que, alguno de los que participó en el proceso mundialista, se quede fuera del torneo por cederle su lugar.
Muy válidas las razones de Carlos, pero, más allá de eso, hay cosas que el jugador, tanto para su carrera profesional, como para su imagen personal, está dejando escapar.
El haber participado en el equipo campeón del mundo, en el Mundial Sub-17 de 2005, le generó a Vela, la oportunidad de ser fichado por uno de los equipos más importantes de la Premier League, el Arsenal, donde tuvo la oportunidad de jugar al lado de figuras como Robin van Persie, Cesc Fábregas y Jack Wilshere.
En este caso del rechazo de Vela de unirse, son Adidas, Coca-Cola, Visa, Gillette, Banamex, por nombrar algunos de los patrocinadores de nuestra Selección, quienes también resienten la negativa.
¿A quién no le gustaría ver a los mejores jugadores mexicanos en los comerciales durante la Copa del Mundo?
Por supuesto, a las marcas les generaría un mayor impacto si cuenta con los jugadores, y un ejemplo es “Chicharito” para Coca-Cola Zero y su ya famoso “¿Por qué no?”; o el caso de Oribe encabezando los comerciales para Visa.
El que Carlos Vela mantenga su distancia con la escuadra tricolor, le da a los patrocinadores la opción de buscar otros jugadores, quienes si serán potencializados en el mercado.
Vela en estos momentos está fuera de las campañas publicitarias tanto para la Selección como para los patrocinadores, y de igual forma, está fuera de la competencia más importante del fútbol.
El desempeño de Vela en la Real Sociedad ha despertado rumores sobre el interés de otros equipos en el mexicano, como es el caso del Arsenal, que podría revocar su cláusula y regresarlo al equipo de la Premier League; por lo que el participar con la Selección Mexicana, podría impulsar su carrera como futbolista profesional teniendo los ojos de todo el mundo en el torneo.
Nuevamente reitero que Carlos Vela tiene sus razones y habrá que respetarlas, pero la oportunidad de ser parte de un equipo nacional, teniendo las capacidades con las que el de Quintana Roo cuenta, es algo que debería de estar en consideración para él, pues como el mismo lo menciona en su comunicado, tal vez cuando él quiera y se sienta listo para regresar a la convocatoria, el Director Técnico en turno, ya no lo tenga considerado.
Por el momento lo único que me queda decir, es que también tiene razón, si hubiera regresado al conjunto tricolor, la prensa hubiera pensado lo que el menciona en su carta, nadie le hubiera perdonado el haber quitado a un jugador que ayudó a México a calificar.
Ahora sólo nos queda esperar que las decisiones del jugador sean las más acertadas, pues el rechazar nuevamente la Selección Mexicana, es un golpe que puede afectar su carrera profesional.